Ser o no ser

Pero no hablando en onda filosófica ni refiriéndome a Shakespeare, si hay algo que me genera más stress que nada son los exámenes, más por que no leo, pues ayer llegué digamos a buena hora a Copilco, llevaba ya mis lecturas listas para imprimir, las que vendrían en el examen y las de la siguiente semana, cómo solo había leído bien la del exterminio de los yaquis decidí no entrar a Filosofía, además que ni leí.

     Y empieza la aventura, una de las lecturas que vendría en el examen era el Manifiesto del Partido Indio, de Bolivia, le digo a de las impresiones: en ese todo el documento. Me dice: son 74 Pág. ahhhh entonces no, algo así me pasó también con otras dos las imprimí mal, hojas que no eran. Salí en total con las lecturas de la siguiente semana y una lectura completa: La guerra de Castas en Yucatán. Cómo lo que sobra en copilco son internets, me metí a otro solo que si van tengan cuidado, no se metan a unos donde dice: impresiones a .20c, si pero no dicen que a partir de 1000.

   Por fin llegué a la facultad con mis impresiones medio bien, solo me falto una de los estudios afro americanos, me fui a refugiar a la biblioteca Samuel Ramos, de milagro encontré un asiento solito cerca de las copias, leí, leí saque ideas principales, anote lo que pude por que a la clase que no falto aunque no haya leído es a México Prehispánico, de por si somos contados (cinco en promedio) y el maestro me cae muy bien.

    Nos hablo de la domesticación de los animales en Mesoamerica de la importancia que llegó a tener el perro que era sacrificado para acompañar al muerto en su viaje al otro mundo, que en Paquimé se han encontrado restos de aves domesticadas, en el área maya se han encontrado vasijas con la figura de loros, en los códices también como el de Sahagún o Madrid, cómo la clase fue rápida termínanos antes y nos empezó a decir que ya se acerca el final del curso y casi nadie le ha entregado reportes de lectura, que nos dará prorroga por que ha faltado mucho y aquí viene lo de ser o no ser: Nos dice a Ely y a mi: ustedes que se ven tan inteligentes y no me han entregado nada jajajaja. Ely le dijo: yo no tengo computadora;  yo respondí: yo tengo un dinosaurio de computadora.

      Quedo en que nos llevará a dar la vuelta el próximo Viernes para celebrar el día de muertos y también que haremos una salida a Xochicalco los que quedamos del grupo, ehhh, lo mejor: a las chicas guapas nos lleva en su coche: Ely, Ale, Rosa, Ish y yo, los hombres que se vayan en camión.  Para que yo si sea y no sólo me vea inteligente ya me puse a leer y entregare unos reportes la próxima semana.

    Y seguía el examen ¿recuerdan que leí y leí? Ahora cambio el formato del examen el profesor nos dio unos documentos para analizarlos, decir de qué época eran, de que trataba, definir de qué tema era y muchas cosas más y no me toco de lo que leí. ¡Plop!

Me toco de la guerra de castas en Yucatán, que al principio lo relacione con el exterminio de los yaquis, pero  después de confirmar la fecha 1855, como que ya recuperé el rumbo, según yo lo hice bien, digo según  hasta que no me de el maestro el examen y me ponga todas sus anotaciones sabré como me fue. Sólo les digo que mi mente como siempre divago y me acorde de la película de Django. Antes de terminar el examen mis tripas me rugían y rugían, hasta pensé que dentro de tanto silencio lo que se escucharían serían mis rugidos, voltee a ver a Ish, digo ni como copiarle o que me soplara algo eran diferentes los documentos, para preguntarle si me acompañaba por unos tacos de canasta, eran las 8:00 ya casi no hay muchas cosas para comer a esa hora. Me dijo que si, entregamos nuestros exámenes y salimos.

      Al llegar al aeropuerto Ish me dijo que si mejor veíamos que había de comer ahí, encontramos unas tortas bastante buenas por cierto o será que teníamos tanta hambre que nos supieron tan ricas, regresamos al salón para esperar a Ely, en el camino vimos a Manu que me pregunto si no iba a entrar a clase o que si Daniela no había llegado, yo respondí: nada más que me acabe mi torta me meto, Ely se nos perdió por que no la vimos ni en uno ni otro salón, cuando por fin termine me meto al salón, al cerrar la puerta Daniela me dice: ¡Cristina! (ahhhh en la madre pensé, ¿qué hice?) ¿Leíste? Si, si leí conteste fuerte y bien contenta y creo que aparte de risas de mis compañeros unos aplaudieron y yo pensé: Chale tan mal estoy que hasta otros se alegran de que si leo, pues no fue por eso, más bien por que los salve de que hubiera examen sorpresa, precisamente por que no leyeron. Hablamos de la baja edad media, como fue cambiando y apareciendo nuevos siervos que se diferenciaban de los vasallos que eran más bien para proteger y eran fieles al señor feudal, como era que tenían que pagar tributos, ya sea con trabajo, animales o siembra, como vivían, que no todos vivían en el castillo, como se empezó a fraccionar los lotes, pero no eran propios los Señores los daban para trabajar, se les llamaba Villas. Yo reí y entendí que fue lo más importante.