Erase una vez...

El Viernes me levanté por que había un cuento que terminar, si no le tomaba la palabra a mi má y no iba ni a la escuela, el jueves en la noche estuve hasta delirando de tanta temperatura que tuve, resultado de las lluvias y que no cargo ni un cartón para taparme, el cuento quedo terminado e impreso a las 3:00, que por cierto no les enseñare ya que me quedo bien chafa y feo, para que se aburran mejor no.

      Llegué directamente al puesto de gorditas/tacos de guisado, como mi estomago ya esta resintiendo la grasa comí un guisado: albóndiga, si sin s por que ¡nada mas era una! con dos tortillas, para no parecer la muñeca fea que se esconde por los rincones, además de que me quedaba más cerca me senté afuera de la biblioteca central, pero me dio pena andar con mi plato de comida ahí vagabundeando por los pasillos, estaba comiéndome mi albóndiga, cuando una pequeña se me queda viendo (me da pena que me vean comer) y que se me cae el tenedor… Le dije: ahora ¿cómo me comeré lo que queda? Se acerca y me dice: no comes tortilla, si como, respondí, pues así me comeré lo que queda, creo que se le antojo, su mamá me pregunto donde me había comprado mi guisado, recordé que en el fondo de mi mochila había unas cucharas bien envueltas en una bolsita, no tuve que comer con los dedos.

     Tenía que sacarle copias a un libro, regresarlo, irme a clase, me quedaba media hora para que empezará la siguiente clase, así que me forme en la fila de las copias, después de mucho tiempo por fin me toco, subí a entregarlo, etc, ya eran 5:30 y si me da mucha pena llegar tan tarde, como me había quedado un hueco en la panza y todavía tenia dinero en la bolsa me comí unos tacos de canasta, en eso me puse a pensar: los que hayan pasado hace una hora me vieron comiendo, si vuelven a pasar me verán haciendo lo mismo, esta no viene a la facultad, viene a comer.

       Y para que no me diera el mal del puerco, me compré un café, como yo muy ingenuamente pensé mi maestro Mauricio ya regreso de Francia, ya va a darnos hoy clase (la exposición creo que ni siquiera a sido inaugurada) que me meto al salón cuando dan las 6:05 que entra… otro profesor, ahhhh, ya no me pude salir y que empieza la clase, y las preguntas y yo rezando para que alguien me salvara, digo que llegarán a la clase, así fue Ale entro también, luego Ely y Rosi y otros, lo único que les puedo decir es que se donde hay basalto, la diferencia entre un cañaveral y un manglar, los tipos de ofrenda que hay en el templo mayor y punto, si no me dormí fue ahora si por un milagro.

        En América Precolombina nos sentamos hasta atrás en la esquina del lado derecho (ahí se chismea, ríe a gusto, además de tener una vista de todo el grupo) y lo más importante: ver si Ish toma apuntes de algo para hacer lo mismo, es que ella se saco el doble que yo en el examen, la lectura fue acerca de los indígenas en Bolivia, que son más del 60% de la población, pero apenas hace muy poco uno llego a ser presidente: Evo Morales, según el autor como ve que siendo mayoría los hayan desplazado, como no leí, no capte bien todo lo que si, es la indumentaria de las señoras que acostumbran traer un sombrerito: ahí mi memoria recordó un libro llamado la tierra de las papas de editorial SM, que precisamente habla de una niña que llega a la ciudad y la atiende precisamente otra niña originaria de Bolivia.

         De que leo, leo que no me acuerde de todo es otra cosa y que no le entienda es peor, así me paso con la lectura de March Bloch de la sociedad feudal,  como vivían, la sociedad, los señores feudales, los enemigos o sea si entendí todo y Daniela nos lo explico dee una manera aún mas clara, que los reinos eran así como sustentados en que fulanito era hijo de sutanito, que era nieto de perenganito, pa pro pronto: así como Aragorn del señor  de los anillos, entendí de maravilla, nos explico que la mortandad era muy grande, no había alimentos, los caminos eran muy peligrosos las poblaciones estaban separadas y me volví a imaginar cuando Frodo y la comunidad del anillo iban hacia Mordor. Como no terminé de leer bien la lectura la haré de nuevo, espero ya no soñar con la edad media, el viernes ese fue mi sueño un castillo con todo y bosque, señores feudales y los ciervos.